Los nueve jueces del Tribunal Supremo, designados por el
presidente de Estados Unidos y ratificados por el Senado, ostentan cargos
vitalicios. Su influencia es con frecuencia mayor que la del presidente. Sus
decisiones son inapelables, nadie puede despedirlos, no rinden cuentas.
¿Antidemocrático? No. Casi siempre, el tribunal ha mantenido la sintonía con la
opinión mayoritaria de los ciudadanos. Los jueces, escribió el politólogo
Robert McCloskey en su clásico The American Supreme Court (El
Tribunal Supremo americano, 1960), “rara vez se han apartado demasiado de la
corriente principal de la vida americana, y rara vez han sobreestimado sus
propios recursos”. Así modelaron los jueces la sociedad estadounidense:
A FAVOR DE LA ESCLAVITUD. Posiblemente Dred Scott vs.
Sandford, de 1857, sea la decisión más vergonzosa de la historia del Tribunal
Supremo. Los jueces dictaminaron que los esclavos no eran ciudadanos y que el
Congreso no podía prohibir la esclavitud en los nuevos territorios de EE UU.
Cuatro años después estalló la Guerra Civil.
INTEGRACIÓN EN LAS ESCUELAS. La decisión Brown vs.
Consejo educativo de Topeka, en 1954, ilegalizó la segregación racial en las
escuelas. La base legal, como en la decisión que este viernes legalizó el
matrimonio homosexual, es la Enmienda 14 de la Constitución, que garantiza la
igualdad ante la ley.
MATRIMONIO INTERRACIAL. Mildred Jeter, una mujer
blanca, y Richard Loving, un hombre negro, fueron detenidos varias veces por
violar las leyes que prohibían los matrimonios entre distintas razas. En el
caso Loving vs. Virginia, de 1967, los jueces dictaminaron que estas
prohibiciones en varios estados eran inconstitucionales.
ABORTO LEGAL. La decisión sobre el caso Roe vs. Wade,
en 1973, reconoció el derecho al aborto en todo el país, pero más de cuatro
décadas después el debate sigue abierto y las divisiones entre progresistas y
conservadores persisten.
RECUENTO EN FLORIDA. En el caso Bush vs. Gore, el
Tribunal Supremo frenó el recuento en Florida, el estado que debía decidir las
reñidas elecciones presidenciales de 2000. La consecuencia fue la victoria del
republicano George W. Bush ante su rival demócrata, Al Gore.
FINANCIACIÓN ELECTORAL. En el caso Citizens United vs.
FEC, de 2010, el Tribunal Supremo abrió la puerta a la financiación sin límites
de campañas políticas. La decisión enfrentó a los jueces con el presidente
Barack Obama.
REFORMA SANITARIA. En dos sentencias, en 2012 y 2015,
el Tribunal Supremo ha avalado la reforma sanitaria, el proyecto central de la
reforma sanitaria de Obama. El Supremo, adversario hace unos años, se ha
convertido en su gran aliado.
FUENTE. EL PAÍS 27 JUNIO 2015